¿Cómo usan redes criminales títulos valores con ESAL en quiebra para lavar activos?

Una tipología emergente en este ámbito es la utilización de Entidades Sin Ánimo de Lucro (ESAL) en quiebra o de fachada para la compra de títulos valores. ¿Cómo funcionan estas operaciones y por qué son tan efectivas para los delincuentes?

Las ESAL en quiebra o de fachada se convierten en herramientas atractivas para las redes criminales debido a su aparente legitimidad y la percepción positiva que generan. Estas entidades pueden ser adquiridas por grupos criminales que aprovechan su estatus para realizar transacciones financieras sin levantar sospechas. En este esquema, la compra de títulos valores se convierte en una vía eficiente para blanquear grandes sumas de dinero.

El proceso generalmente comienza con la adquisición de una ESAL en quiebra o la creación de una entidad de fachada. Una vez bajo control, los delincuentes inyectan fondos ilícitos en la organización, disfrazados como donaciones o aportes legítimos. Luego, la ESAL utiliza estos fondos para comprar títulos valores, como bonos o acciones. Estos títulos son adquiridos a través de mercados financieros regulados, lo que otorga una apariencia de legalidad a los fondos ilícitos.

Una vez que los títulos valores son comprados, pueden ser vendidos posteriormente, generando ganancias aparentes que parecen ser legítimas. Este proceso permite a los delincuentes transformar el dinero sucio en activos aparentemente legales, que pueden ser introducidos en el sistema financiero sin levantar sospechas. ¿Qué señales de alerta pueden ayudar a identificar este tipo de operaciones?

Entre las señales de alerta más comunes se encuentran:

1. Las transacciones financieras que no se alinean con la naturaleza o los fines de la ESAL
2. La compra de títulos valores de alto valor sin una justificación clara
3. y la aparición de patrones de transacciones inusuales o complejas.
4. Además, la falta de transparencia en los informes financieros y la estructura de propiedad opaca de la ESAL son indicativos de posibles actividades ilícitas.

Para combatir esta tipología, es esencial que las autoridades y las instituciones financieras implementen medidas rigurosas de debida diligencia y monitoreo. Esto incluye la verificación exhaustiva del origen de los fondos y la transparencia en las actividades financieras de las ESAL. Además, es fundamental fortalecer la cooperación internacional para rastrear y compartir información sobre transacciones sospechosas y estructuras corporativas opacas.

La compra de títulos valores utilizando ESAL en quiebra o de fachada es una estrategia sofisticada que permite a las redes criminales lavar dinero de manera efectiva. La clave para prevenir y detectar estas actividades radica en la implementación de controles robustos y una vigilancia constante por parte de las autoridades y las instituciones financieras.